La Fiscalía General de Guerrero informó sobre la liberación de los tres periodistas y la esposa de uno de ellos, secuestrados, en dos eventos diferentes, la semana pasada en el municipio de Taxco.

Las primeras investigaciones señalan que el periodistas Marco Antonio Toledo Jaimes, director del Semanario Espectador de Taxco, y colaborador de N3 Guerrero y La Crónica Vespertino de Chilpancingo, fue sustraído de su domicilio, junto con su esposa e hijo, desde el pasado 19 de noviembre.

Mientras que Silvia Nayssa Arce Avilés y Alberto Sánchez Juárez, periodistas de RedSiete, desaparecieron el 22 de noviembre en el centro de Taxco.

La Fiscalía de Guerrero afirmó que la liberación de estas cuatro personas fue derivado de los operativos de búsqueda y el despliegue de autoridades se seguridad federales y estatales para dar con su paradero.

«Lo anterior, se confirma después de que esta institución de procuración de justicia obtuvo la prueba de vida y la comparecencia de las víctimas ante el Ministerio Público correspondiente, de conformidad con el protocolo homologado de búsqueda de personas desaparecidas», indicó la Fiscalía guerrerense.

Familiar, sin aparecer

Cabe señalar que hasta el momento, el hijo de Marco Antonio Toledo Jaimes, Alberto Toledo Denova permanece en calidad de desaparecido.

En un comunicado, las autoridades añadieron que como parte de las acciones para dar con el paradero de Alberto Toledo Denova, agentes ministeriales, personal del Ejército Mexicano, de la Guardia Nacional, Policía Estatal y la Comisión Estatal Búsqueda de Personas, mantienen los operativos de búsqueda efectuando recorridos y el despliegue de efectivos en dicha zona.

Tras denunciarse la desaparición de los periodistas y sus familiares, Artículo 19 y Cimac urgieron al Estado mexicano a otorgar las garantías de seguridad necesarias para el desempeño de la labor periodística en Guerrero.

Mientras que el periódico La Crónica Vespertina, acusó que Marco Antonio Toledo ya había recibido amenazas por su trabajo periodístico en el que denunció presuntos actos de corrupción por parte del alcalde de Taxco, Mario Figueroa Mundo, así como el desplazamiento forzado de peregrinos por el crimen organizado.